Paseos y excursiones:

Modelo top

Un puente colgante ondulado es la entrada a este balneario a la moda que se encuentra a tan sólo minutos de Punta del Este. En él, lo top y la estética se ven a toda hora del día.

A la moda por donde se la mire, basta con cruzar el siempre moderno puente para darnos cuenta de que hemos llegado a un lugar diferente donde la juventud, lo estético y sobre todo las últimas tendencias son parte de los atractivos naturales.

La llegada del calor, y sobre todo en aquellos días en que las temperaturas superan los 30º C, hace que La Barra muestre al visitante parte de sus costumbres, impuestas por sus habitúes así como también por quienes la visitan solo en la temporada estival.

Ubicado a 20 kilómetros de la península de Punta del Este, el sitio fue siempre un excelente pesquero de corvinas negras, las cuales con marea alta entraban hasta la laguna en busca de los cangrejales que allí se forman naturalmente.

Los años lograron que alrededor de la laguna y de las playas del bravo mar decenas de visionarios comenzaran a construir sus casas de veraneo, sus restaurantes de mariscos e incluso algunos complejos y paradores que, alejados del bullicio de Punta del Este, comenzaron a dar que hablar a quienes se animaban a llegar tan lejos.

Así, este lugar se convirtió en uno de los sitios más top que tiene las playas del este, al que la farándula local y extranjera logró darle un clima tipo Hollywood.

Chicas

Luego de cruzar el puente colgante, una pequeña carretera que además pasa a transformarse en la calle principal de la ciudad deja ver a ambos lados decenas de paradores y locales comerciales. Entre ellos sobresalen restó, bares, hoteles, aparts y boliches de todos los estilos, los cuales apenas cae el sol se apoderan literalmente de esta pequeña ciudad e invitan a entrar.

De día, las playas se visten de shorts de baño y bikinis, tragos, refrescos y bronceadores.

Los jóvenes se hacen notar y la tecnología que usan en las ciudades pasa a formar parte de este lugar de descanso: mp3, mp4, ipods y teléfonos celulares para encontrarse. No por nada muchos paradores de La Barra han incorporado en los últimos tiempos distintos sistemas para que sus visitantes se sientan todo el día conectados, desde computadoras con banda ancha hasta modernos sistemas WI FI para navegar incluso a metros de la orilla.

De noche, la música, las marcas y el ritmo se apoderan de cada una de las caderas que salen a ver qué pasa, tanto sobre la calle principal como en las pequeñas laterales que dan al mar.

Salir a comer, tomar algo, ir a bailar y luego hacer tiempo hasta el amanecer son algunos de los códigos que se dan en La Barra, un lugar único donde los mundos de la moda y el espectáculo se encuentran todos los años.

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