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Sentir el arte

En el interior de la Casa de la Cultura funciona el Museo de Arte de Durazno. Una visita a su interior nos conecta con las expresiones artísticas más importantes de la región.

La centenaria casona donde funciona la Casa de la Cultura y el Museo de Arte de Durazno fue construida en la década de 1870 como residencia del inmigrante italiano Dr. Emilio Penza Spinelli. Este notable habitante fue el presidente de la Comisión de Actos Conmemorativos del IV Centenario del Descubrimiento de América, desde la cual se impulsó la construcción del monumento en honor a Cristóbal Colón.

Posteriormente, la célebre residencia obtuvo un rico historial educativo en el siglo XX, ya que en su interior funcionó el Liceo Público y luego el Instituto Magisterial, desde donde se formaron centenares de maestros. Con los años, el edificio pasó por un acentuado proceso de deterioro, pero en el año 2000 se procedió a su restauración por orden de la Intendencia local y se instaló en ella hasta nuestros días la Casa de la Cultura y el Arte.

En el interior de una de sus salas, se exhiben importantes y diferentes obras del reconocido artista Claudio Silveira Silva. La obra de este afamado pintor, grabador y escultor está íntimamente ligada a Durazno. La colección excepcional de sus esculturas constituye una muestra única en su género en el país.

Entre el legado artístico de Claudio se puede apreciar la “Virgen de Farruco” y el retablo “El negrito del pastoreo”- dos de sus obras más trascendentales inspiradas en la región.

La otra sala del museo se encuentra habilitada para exponer distintas muestras itinerantes de artistas locales.

Hoy el edifico que contiene estas expresiones artísticas fue declarado Monumento Histórico Departamental. Vale la pena visitarlo.

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